La Anorgasmia
¿Qué es la Anorgasmia? Tipos, síntomas y posibles acciones
La anorgasmia es una disfunción sexual caracterizada por la dificultad o imposibilidad persistente de alcanzar el orgasmo tras una fase de excitación sexual adecuada. Puede presentarse tanto en hombres como en mujeres, aunque su prevalencia es significativamente mayor en mujeres.
Según el Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM-5), se clasifica como un trastorno del orgasmo femenino o masculino y debe causar malestar clínicamente significativo para ser considerado patológico (APA, 2013).
Se distinguen varios tipos:
- Primaria: la persona nunca ha experimentado un orgasmo.
- Secundaria: la persona ha tenido orgasmos en el pasado, pero ha perdido esa capacidad.
- Situacional: ocurre solo en determinadas circunstancias o con ciertas parejas.
- Generalizada: ocurre en todo tipo de interacción sexual, incluso en la masturbación.
Síntomas de la anorgasmia
Incapacidad para alcanzar el orgasmo durante el sexo con penetración
Dificultad para llegar al clímax incluso con estimulación directa del clítoris o zonas erógenas
Frustración o ansiedad relacionada con el desempeño sexual
Sensación de “bloqueo” o desconexión durante la excitación
Orgasmos que son muy leves o que nunca llegan a completarse
¿Te suenan estos síntomas?
Si crees que puedes estar padeciendo de Anorgasmia, escríbenos. Estamos aquí para escucharte.
Preguntas frecuentes
¿Tienes dudas? Aquí te respondemos
¿Qué tipos de anorgasmia existen?
Existen varios tipos.
La anorgasmia primaria se refiere a personas que nunca han experimentado un orgasmo en su vida, mientras que la secundaria aparece tras haber tenido orgasmos anteriormente. También puede ser situacional (solo ocurre en ciertos contextos o con ciertas parejas) o generalizada (afecta en todas las circunstancias).
Identificar el tipo es clave para enfocar el tratamiento correctamente.
¿Es solo un problema femenino?
No. Aunque es más común en mujeres, los hombres también pueden experimentar anorgasmia.
En ellos puede estar relacionada con medicamentos, trastornos neurológicos o dificultades emocionales.
En todos los casos, es importante una evaluación integral para entender qué está ocurriendo.
¿Qué técnicas utiliza la sexología para tratar la anorgasmia?
Desde la sexología se trabaja con herramientas como la educación sexual, la masturbación dirigida, los ejercicios de enfoque sensorial, el uso de vibradores o dispositivos de pulsación de aire, y la terapia cognitivo-conductual para desactivar bloqueos psicológicos.
En algunos casos también se recomienda terapia de pareja o ajuste de medicación si está influyendo.
¿Puedo superar esto aunque nunca haya tenido un orgasmo?
Sí, es posible. La anorgasmia primaria, aunque puede requerir más tiempo y trabajo personal, tiene tratamiento. Muchas personas que nunca habían experimentado un orgasmo logran alcanzar el clímax mediante un proceso guiado de exploración, educación y acompañamiento terapéutico.
¿Es recomendable el uso de vibradores u otros dispositivos?
Totalmente. Los dispositivos de estimulación (como los vibradores o los de pulsación de aire) son herramientas muy útiles para aumentar la sensibilidad, mejorar la conexión con el propio cuerpo y favorecer el orgasmo. Son una parte más del tratamiento, especialmente si se integran con otras técnicas.
¿Cuándo buscar ayuda profesional para la Anorgasmia?
Es recomendable acudir a un profesional en sexología y psicología cuando la anorgasmia te está causando angustia, frustración o afecta tu autoestima. También es un buen momento para buscar apoyo si esta disfunción impacta negativamente tu relación de pareja o tu vida sexual en general. No es necesario lidiar con esta situación en solitario.
Buscar ayuda profesional te permitirá:
- Explorar y comprender mejor tu propia respuesta sexual.
- Identificar si existen factores psicológicos, relacionales o culturales que estén interfiriendo.
- Recibir un tratamiento especializado y personalizado que te ayude a mejorar tu bienestar.
La intervención temprana favorece un tratamiento más eficaz y ayuda a prevenir la cronificación del problema, contribuyendo significativamente al bienestar psicoemocional y sexual.
¿Qué esperar de una sesión de Terapia para la Anorgasmia?
Una consulta con un sexólogo/a clínico/a se desarrolla en un espacio seguro y sin juicios, con el objetivo de comprender tu situación en profundidad. Generalmente, una sesión incluye:
Evaluación clínica integral: Una revisión detallada de tu historial médico, psicológico, relacional y sexual.
Psicoeducación: Se proporciona información científica y libre de juicios sobre la respuesta sexual humana, los mitos sexuales y el funcionamiento del cuerpo.
Terapias basadas en evidencia: Aplicación de enfoques terapéuticos validados, como la terapia cognitivo-conductual, terapia de pareja o mindfulness sexual, adaptados a tus necesidades específicas.
Enfoque colaborativo y sin juicios: Se establece una alianza terapéutica que fomenta la confianza, la privacidad y la apertura.
El objetivo principal es entender tu situación particular y las causas subyacentes para poder diseñar un plan de intervención personalizado que te ayude a alcanzar tus objetivos. La anorgasmia, con el acompañamiento adecuado, tiene un pronóstico muy positivo.
Mitos comunes sobre la Sexualidad y la Anorgasmia
A continuación, desmentimos algunas ideas erróneas que pueden influir en la experiencia de la anorgasmia:
«Todas las mujeres deben tener orgasmos solo con penetración«: Falso. La mayoría de las mujeres requiere estimulación directa del clítoris para alcanzar el orgasmo.
«Si no llegas al orgasmo, no disfrutas del sexo«: Falso. El placer sexual es multifacético e incluye afecto, conexión, deseo, entre otros elementos. Aunque el orgasmo es un componente deseado, la ausencia de este no anula otras formas de placer y disfrute.
«El orgasmo es igual para todos«: No. La experiencia orgásmica es subjetiva y varía entre personas y momentos.
«Hablar de sexo es innecesario si la pareja se ama«: Falso. La comunicación sexual es clave para una vida sexual satisfactoria y para abordar cualquier dificultad, incluida la anorgasmia.
«Solo hay un tipo de orgasmo»: Falso. Hay diferentes formas de experimentar orgasmos (clitoriano, vaginal, mixto, entre otros), y todos son válidos. El orgasmo, en última instancia, ocurre en nuestro cerebro.